
Nací a principios de la década de los 80. No soy una de las personas con una gran memoria. Si mantengo el recuerdo en mi niñez de que se hablaba de algo llamado crisis, que no era visto como algo bueno. También recuerdo la sequía de lluvias que azotó en los 90. Recuerdo el final de la época del Felipismo, con grandes revuelos de corrupción y alto nivel de desempleo. Recuerdo un "España va bien". La llegada de una nueva moneda. Un creciente número de extranjeros en mi ciudad. Muchos compañeros universitarios de mi alrededor cursando la beca Erasmus. Un aumento del precio de la vivienda que estaba en boca de todos. Un aumento cada vez mayor que desembocó en la situación que estamos viviendo en estos momentos.
En mi corta vida, voy a ser testigo de una segunda crisis (aunque de la primera no fuí muy consciente también hay que tenerla en cuenta). Hubo crisis a finales de siglo, hay crisis a comienzos del siguiente y habrá en las décadas siguientes; a esto se le denomina "ciclo económico" y forma parte intrínseca del país y de su economía.
Lo que estamos viviendo nosotros quizás en un futuro lo vivan nuestos hijos, aunque eso sí, con ciertos matices. Las crisis pasadas no son iguales a la actual, y la actual será distinta a las futuras, el punto de partida es distinto.